martes, 18 de noviembre de 2014

UN POCO DE CAFE-ÍNA

Creo que las mejores historias son aquellas que más que vividas son contadas y soñadas, aquellas que nunca se enfrentarán a una estúpida primera cita, que probablemente acabe en desastre. No quiero generalizar, es cierto que existen mujeres que son una de las mejores versiones de Audrey Hepburn en desayuno con diamantes, o cualquier mujer que el día de mañana será exitosa, guapa, perfecta, buena esposa y ama de casa, un estupendo mueble de diseño que colocarás en el salón y no dará ni media guerra. Pero yo soy una versión un poco distinta de la historia. Por eso quería aclarar que puede que existan mujeres y hombres perfectos, eso sí, si los encuentran a mi no me llamen. Siguiendo con el toque de pesimismo que dicen por el ala norte que me caracteriza, contaré que las primeras citas nunca fueron buenas, igual que las segundas oportunidades, por eso yo soy mucho más de citas con amigos y luego ya, si eso, terceras citas a solas. Ahora viene la cuestión. Soy bastante bocazas, por lo que en una cita a solas y más aún si el susodicho-chaval-loquesea es tímido, vaya gracia bonita que no das una, me pondré a contar cosas estúpidas de las que me arrepentiré en el momento en el que decida largarme de ahí, antes de caerme en la tumba que me estoy cavando. Si el susodicho es del club de los chulitos, algo que no creo que me ocurra nunca porque no soy socia de ese sitio, me pondré más chula todavía y  el chaval-niñato-loquesea conseguirá sacar la peor parte de mi, con una retahíla de palabrotas y gilipolleces intentado hacerme la machota de los dos , y no hacía falta hablar porque sus tres litros de colonia y su medio kilo de gomina lo habían dejado claro incluso antes de que apareciera. Y por último, si el chico es normal y merece la pena, por favor llamadme, con este igual si me propongo tener una primera cita.

miércoles, 29 de octubre de 2014

Mi norte y mi sur

Y entonces llegarás tu, para limpiar todo este desastre, para pedirme una prorroga, para pedir un crédito a mi corazón y prometerle que le irás devolviendo todo lo que un día alguien le robo, para cuidarle con cuidado, para tener cuidado con quererle bien y mucho y bonito y más y mejor y hoy y más mañana y más siempre. Hasta entonces, aquí estamos el y yo, esperándote, queriéndote hasta que aparezcas para regalarte todas las historias que sólo hablé con la primavera.

jueves, 23 de octubre de 2014

Me lo dijo un cantautor

Mi vida es una montaña rusa, una eterna resaca, un móvil lleno de mensajes que nunca debieron de ser enviados, y tú eres peor que la bomba de Hiroshima. Eres un latido perpetuo que rebota en mi cabeza cada cinco segundos, eres una puñetera tormenta de arena, eres un hombre de sonrisa que hiela los ojos. Eres el trigo que eligen las amapolas. Eres el que nunca debió ser nombrado.

Locura para la razón operación suicida, tu terremoto de pasión, tu beso de la vida, tu viento de revolución, tu mi cardiopatía. Tu pasas tan cerca de mi que me robas la calma, yo trato de escapar de ti y se me enreda el alma. (Carlos Lázaro) 

Y después de esto solo se que me encantaría seguir corriendo detrás, mientras pisas el acelerador y nos comemos el puto muro que nos separa de la realidad pero hacerlo como sabemos, tan sin ti que tú siempre conmigo.

lunes, 20 de octubre de 2014

No fui yo, fue Dalí

No es por ti, es ella. Es ella la que no me gusta para ti, la que me parece irreal en toda esta historia. Siempre te lo he dicho, siempre me has dicho que yo era diferente pero que más da si no te gusta eso, si prefieres un patrón sencillo, uno que venga con instrucciones y que sea fácil hacer.

No me gustas tú, no me gusta ella. Esto te hace cobarde, te hace fácil, y deja de decir que soy complicada. Yo no me siento en la silla si me puedo sentar en el suelo y eso te saca tan de tus casillas. No pongo buena a cara a todo, me levanto de mal humor muchas mañanas, me río por tonterías hasta que me duele la tripa, tengo más cara que espalda, no soy pequeñita, tímida o reservada, soy más un volcán en erupción que te puede estallar en las manos, pero siempre voy de cara. Si te insulto será de frente, si tengo algo que decir te lo diré a ti, me pegaría con cualquiera, pero bebé tengo algo bueno y es que se me ve venir, que soy lo que pone en mi DNI

Y te lo he dicho mil veces amor, soy desordenada, fumadora, no tengo filtro en la boca, soy abogada de las causas perdidas, cabecilla de las revueltas y muy muy caótica, pero eso me hace diferente y no digo especial. (Luego soy yo la complicada) Dijo Dalí un día que para interesarle a alguien hay que provocarle y nosotros nos provocamos mucho.

martes, 19 de agosto de 2014

Punto y seguido

He intentado encontrar la tinta adecuada para escribir un punto y final después de nuestro paréntesis, pero una vez más he vuelto al lugar del crimen, y no sé como te voy a encontrar, si a medias o entero, si medio mio o todo de alguien. Vivo de recuerdos que inundan los momentos, vivo de pasado y sé que eso no es eterno, pero no vivir sin eso es imposible. He intentado cerrar esta historia, he metido a otros entre comillas, pero nunca han estado en mayúsculas y rodeados tres veces con subrayador en mi mente como ha estado tantas veces tu  n o m b r e . No me culpes, vivo buscando un motivo que no encuentro, creo que lo busco en la superficie, porque no tengo la valentía suficiente de encontrarlo y poner  punto y final, porque después de cada paréntesis escribo otro párrafo. Que triste pensarán algunos, nuestra historia es de contrabando, que feliz soy yo pensando que hay una historia. Esto juro que no es A M O R.

domingo, 17 de agosto de 2014

Menos nosotros

Dicen que cuando se juntan dos ríos es más fuerte la corriente, dicen que todo es posible,  digo que todo es posible menos nosotros. Porque no se puede escribir hoy con las letras de ayer, ni todos los rotos pueden ser cosidos. Yo siempre veía el vaso medio lleno y tu simplemente no lo veías, te nombro culpable de mis derrotas por darme cabida en esta batalla, por animarme a luchar por algo que tu mismo sabías que nunca iba a funcionar. Te culpo porque un día me quisiste y no volviste a hacerlo más, por los días que te escribí y todas las noches que te soñé, te culpo porque no mentiste pero tampoco dijiste la verdad, por dejar la puerta entornada. Eres desquiciante y extremadamente dulce, como ese libro que no quieres que se acabe pero es inevitable, así somos, así estamos inevitablemente destinados al fracaso y hablo en plural porque de esto no saldremos vivos ninguno de los dos, tú por inconsciente y yo, yo por ser demasiado consciente y caminar de puntillas sobre la estrecha linea que nos separa del abismo. Y es que querido somos juntos el eterno prólogo de una muerte anunciada.